Qué funciona para prevenir las alergias alimentarias
Es importante que las futuras madres sean conscientes de lo que funciona para prevenir las alergias alimentarias a sus hijos (y lo que no), ya que las alergias alimentarias son una de las enfermedades crónicas más comunes en los niños.
Y la frecuencia con la que se observan está aumentando: se estima que uno de cada cinco niños desarrollará una alergia a la edad de tres años.
Estos son los consejos de los expertos
Bajo esa consideración previa, es interesante tener en cuenta los consejos de los expertos.
Agrupados en base a las preguntas que se hace la población, aquí van dichas recomendaciones:
¿Es mejor evitar ciertos alimentos durante el embarazo para prevenir que mi hijo sufra alergia?
Los estudios más frecuentemente realizados para prevenir el desarrollo de las alergias alimentarias están hechos con evitación del huevo y la leche en las madres. Y la mayoría de estudios concluyen que no se obtienen grandes resultados en la prevención de alergias en los hijos al evitar esos alimentos, tanto durante el embarazo, lactancia o en la infancia.
De hecho puede ser mayor el daño que el beneficio: se reducen nutrientes vitales y fibras, afectando tanto a la madre como al hijo.
¿Es mejor alimentarle con el pecho? ¿Le puedo pasar las alergias a mi hijo?
Para prevenir las alergias no hay evidencia científica a favor o en contra de la lactancia
materna. No obstante, aunque no se sepa si previene o no las alergias alimentarias, la alimentación del bebé a través de la leche materna cumple con los requisitos nutricionales de los niños hasta
los 6 meses de edad y es recomendado por la Organización mundial de la salud.
¿Cómo debería introducir el huevo en la dieta de mi hijo: cocinado, crudo o ninguno de los dos?
La alimentación complementaria se inicia cuando la alimentación materna o con fórmulas no es suficiente para el niño. Se introducen alimentos o líquidos suplementarios y se debe iniciar a partir de los 6 meses de edad, según recomienda la Organización mundial de la salud (OMS).
En el caso del huevo, se recomienda añadir huevo de gallina bien cocinado (pero no crudo, pasteurizado o poco cocinado) en la dieta del infante como parte de su alimentación complementaria. Con esta medida probablemente pueda prevenir la alergia al huevo en los infantes.
Notese que se dice “probablemente”, ya que la evidencia científica es moderada. La recomendación práctica de la Academia Europea de Alergia es introducir aproximadamente medio huevo pequeño bien cocinado dos veces por semana en la alimentación complementaria desde los 4 meses (tal como indica la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) a los a 6 meses de edad.
¿Qué hago con los frutos secos?
Lo más estudiado es sobre el cacahuete y sobre todo en países con alta frecuencia de alergia a estas legumbres usadas como frutos secos.
En estos casos es mejor suplementar con cacahuetes al niño de 4 a 11 meses ya que probablemente haya una gran reducción en la alergia al maní.
Para evitar los riesgos de inhalación o ahogo, se le puede dar el cacahuete al niño buscando la forma más apropiada según su edad. Por ejemplo en forma de mantequilla de cacahuete diluida una cucharadita de café cada semana. En los países donde haya baja prevalencia de esta alergia, se introducirá en la dieta siguiendo los hábitos locales.
¿Qué no funciona para prevenir la alergia alimentaria en los niños?
Es vital tener en cuenta lo que no se debe hacer para prevenir alergias alimentarias:
a.
No suplementar con fórmulas de leche de vaca
Mejor no suplementar con fórmulas de leche de vaca a los lactantes en la primera semana de vida si se quiere prevenir la alergia a la leche de vaca. La mayoría de infantes maduros y sanos no necesitan ningún suplemento si están con la lactancia materna.
b.
Fórmulas infantiles basadas en leche de vaca mejor que leche de vaca normal
Si se necesita un substituto de la leche maternal después de la primera semana de vida, se pueden dar fórmulas infantiles basadas en leche de vaca mejor que leche de vaca normal, ya que las fórmulas no presentan riesgos y son más fáciles de digerir que la leche de vaca.
c.
No se recomienda usar fórmulas basadas en proteínas de soja
No se recomienda usar fórmulas basadas en proteínas de soja en los 6 primeros meses
de vida para prevenir la alergia a lácteos, ya que no hay evidencias de que funcione y puede haber riesgos en el lactante por las concentraciones elevados de fitatos (ácido fítico), aluminio e isoflavonas.
.d
Suplementos vitamínicos en las embarazadas
No hay evidencia que los suplementos vitamínicos dados a las embarazadas o mujeres lactantes puedan prevenir la alergia a alimentos.
e.
Suplementos de grasas de pescado
Tampoco hay evidencia con los suplementos de grasas de pescado, aunque si se toman durante el embarazo y se continúan durante la lactancia, hay una pequeña evidencia que pueda disminuir la alergia a alimentos en niños pequeños que tengan riesgo alto.
f.
No funciona como prevención
Si la mujer que da el pecho a su hijo no tiene las cantidades necesarias de vitaminas, minerales u Omega 3 en su dieta, se puede suplementar por razones sanitarias, pero no como prevención de la alergia alimentaria a sus hijos.
g.
Probióticos y prebióticos
Aunque no haya evidencia que los probióticos, prebióticos y simbióticos produzcan daño en los hijos, tampoco hay una evidencia sólida en que tengan alguna utilidad en la prevención de la alergia alimentaria. Se recomienda cuidado en el uso de niños prematuros si hay riesgos de inmunosupresión.
h.
Vacuna BCG
La vacunación de la tuberculosis (BCG) debe usarse en los países con alta incidencia de esta enfermedad, pero no hay evidencia de su utilidad como prevención de las alergias alimentarias.
Como conclusión:
El camino general a seguir para las madres es realizar una dieta saludable y balanceada.
Mientras estén embarazadas las mujeres deber consumir los alimentos frescos que son habituales en su entorno y en su familia, más que tratar de prevenir las alergias alimentarias evitando los alimentos que consideren de riesgo o tomando algunos suplementos como probióticos, vitaminas o minerales.
Primera redacción: 24 oct 2022 Actualizado: 19-abr-2023
Imagen: Daria Yakovleva Pexels Bob Pixabay