Un enfermo, una vía
Muchos enfermos que padecen rinitis terminan sufriendo asma. De hecho, la rinitis alérgica se considera uno de los principales factores de riesgo para el desarrollo del asma, complicando enormemente la enfermedad.
[quote align=»center» color=»#999999″]Casi la mitad de los pacientes con rinitis no han ido nunca al médico
En los niños es especialmente importante el tema, ya que a menudo se produce el fenómeno conocido como «marcha alérgica«: el infante comienza a presentar alteraciones en la piel (dermatitis atópica) o problemas con los alimentos (alergia alimentaria).
Posteriormente evoluciona y aparecen síntomas en la nariz (rinitis alérgica) y finalmente termina padeciendo asma bronquial
Los datos son claros
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- 1/3 de todos los pacientes con rinitis padecen asma
- … y la mayoría de los asmáticos tienen rinitis (un 60% presentan síntomas a nivel de nariz)
- 1 de cada 4 asmáticos que no controlan bien su enfermedad presentan rinitis grave
- la alergia es la causa de más del 80% de todos los casos de asma
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La explicación
La alergia se produce por una lucha del sistema inmunitario frente a sustancias externas inicialmente no dañinas.
La exposición a estas sustancias (alérgenos) puede conducir a alteración tanto en las vías respiratorias superiores (rinoconjutivitis) como en las vías respiratorias inferiores (asma bronquial).
La base es la inflamación alérgica en las vías respiratorias. Durante los ataques de asma los bronquios presentan inflamación aguda. Igualmente la mucosa de la nariz está inflamada en la rinitis alérgica.
Ésta sería la hipótesis de la vía única, o lo que es lo mismo, «una vía, una enfermedad».
Por lo tanto se recomienda un enfoque integrado y un tratamiento unificado en la rinitis y el asma bronquial, ya que el enfermo es el mismo. Se recomienda un diagnóstico precoz y control adecuado de la rinitis alérgica, para prevenir el desarrollo de la enfermedad hacia el asma.