¿Existe la alergia al sol?
Conoce las causas detrás de las reacciones cutáneas ante la luz solar
La alergia al sol es un término ampliamente utilizado para describir cualquier reacción cutánea que se produzca o empeore debido a la exposición solar.
Sin embargo, desde un punto de vista más técnico, sería más adecuado referirse a estas reacciones como fotodermatosis. Las fotodermatosis incluyen tanto enfermedades alérgicas como no alérgicas y pueden manifestarse de diversas maneras en la piel.
Entre estas afecciones se encuentran las dermatitis fotoalérgicas de contacto y la urticaria solar.
En ambos casos, la piel puede reaccionar de manera intensa a la exposición solar, lo que puede provocar una serie de síntomas desagradables como picor, inflamación, erupción cutánea y ampollas.
La erupción polimorfa lumínica
es la reacción más frecuente al sol
La dermatitis polimorfa es una afección cutánea que puede presentar múltiples lesiones en la piel. Estas pueden variar desde placas y ampollas hasta eccemas, erosiones e incluso costras. Sin embargo, en cada paciente, suele aparecer solo un tipo de lesión. Como su nombre sugiere, la enfermedad es polimórfica, lo que significa que se puede presentar de diferentes maneras en distintos pacientes.
La dermatitis polimorfa tiende a aparecer al final de la primavera o principios del verano, coincidiendo con la exposición al sol en zonas más expuestas como la cara, el cuello y las extremidades. Los síntomas suelen desaparecer a medida que avanza el verano y disminuye la exposición al sol.
Se cree que esta enfermedad afecta a una de cada cinco personas de la población, especialmente a mujeres jóvenes durante la segunda y tercera década de vida. Aunque no se sabe exactamente qué la causa, se piensa que la dermatitis polimorfa puede estar relacionada con una reacción alérgica a la luz solar
Hay enfermedades que aún son un misterio para la medicina moderna. Una de ellas es la que se conoce como urticaria solar, una afección que se presenta con más frecuencia en mujeres jóvenes.
Su origen sigue siendo desconocido, aunque se cree que está relacionado con una hipersensibilidad en la piel.
¿Que es la urticaria solar?
La urticaria solar se manifiesta rápidamente después de la exposición al sol. En pocos minutos, la piel se vuelve roja y comienza a picar intensamente. Al cabo de unos 5 o 10 minutos, aparecen habones o ronchas en la zona de la piel expuesta al sol. Afortunadamente, estas ronchas desaparecen en pocas horas sin dejar cicatrices o marcas.
Sin embargo, en algunos casos, la urticaria solar puede provocar síntomas más graves. Aunque son poco frecuentes, algunas personas pueden experimentar náuseas, dolor de cabeza, sensación de asfixia e incluso una bajada de la tensión arterial.
También influye la herencia familiar y algunas plantas
Algunas personas desarrollan fotodermatosis debido a un factor hereditario que se presenta en su familia. Es el caso de algunas enfermedades del grupo de las porfirias, donde es característico que al enfermo le salgan pelos en los pómulos y tenga una piel oscura muy frágil que se rompe con frecuencia.
La zanahoria, apio, perejil y chirivía son plantas de la familia de las umbelíferas usados en la antigua medicina China o India. El problema es que contienen psoralenos, potentes sustancias químicas que cuando reciben la radiación ultravioleta en la piel pueden generar el pigmento de la piel melanina, unirse al ADN y producen la muerte celular.
¿Cuándo podemos sospechar de un caso de alergia al sol?
Cuando una persona padece este tipo de alergia, el aspecto de la piel afectada puede variar ampliamente según el origen del problema.
Entre los signos y síntomas más habituales que podrían llevarnos a inferir una alergia al sol encontramos:
- Enrojecimiento
- Picor intenso
- Pequeños bultos que pueden convertirse en manchas elevadas (placas)
- Descamación, costras o sangrado
- Ampollas o ronchas
Estos signos y síntomas generalmente se presentan sólo en la piel expuesta al sol, respetando zonas como detrás de la oreja, los párpados o debajo de la barbilla donde no suele alcanzar la radiación solar o es de menor intensidad.
Lo habitual es que el intervalo entre la exposición solar y el desarrollo de la erupción sea de 5 a 10 minutos tras la exposición como en la urticaria solar pero puede iniciarse desde 30 minutos a varias horas después como en la erupción polimorfa lumínica.
¿Cuáles son los tratamientos habituales?
En presencia de casos leves de alergia al sol los síntomas pueden desaparecer sin mediar tratamiento alguno. En casos más molestos o graves se puede recurrir a los corticoides tópicos como antiinflamatorios, siempre con la potencia adecuada según la localización y extensión de las lesiones.
Los antihistamínicos pueden controlar el prurito y en ocasiones se pueden usar pastillas de esteroides o compresas frías.
Las personas que tienen una alergia al sol grave pueden necesitar tomar medidas preventivas y usar ropa que las proteja del sol. Deben buscar zonas de sombra en las horas pico de radiación ultravioleta (de 10 am a 14 pm) y usar medios de foto protección que incluye gafas de sol y protectores solares.
La ropa, incluyendo los sombreros de ala ancha, ofrece una fácil y duradera protección solar. En cualquier caso, siempre que se sospeche de estar sufriendo episodios alérgicos, se recomienda acudir a un especialista y realizar las pruebas para confirmar las sospechas.
Sólo así se podrá dar con el tratamiento adecuado a cada caso y mejorar la calidad de vida de la persona que la padece.
Actualizado: 22 de abril de 2023 Fecha de primera publicación: 24 junio, 2022 Imágenes: Freepik | R+R Medicinals Unsplash